Fue concebida como Mezquita Mayor por la cultura musulmana que se estableció en la Península Ibérica durante más de 700 años. Su alminar, lo que hoy se conoce como la Giralda, comenzó a construirse en 1184 y se termina en 1198 coronada por el -yamur- (cuatro esferas doradas). La conquista cristiana hizo que se convirtiera en la iglesia-catedral de Santa María. El monarca Fernando III de León y de Castilla, conocido como ‘el Santo’ y conquistador de Sevilla, fue enterrado en la Capilla de los Reyes. Un terremoto derriba el -yamur- y es sustituido por un campanario de madera que costea el rey.
En el 1400 tras retirarse el campanario de madera y sustituirse por una espadaña sobre cuatro pilares sobre la que se colgaría la campana, se coloca en la Giralda el primer reloj público de Sevilla. Años después se decide la construcción de una nueva catedral, comenzando las obras por el derribo de la Capilla Real. Antes, los restos de los monarcas allí enterrados (Fernando III, Alfonso X el Sabio y Pedro I el Cruel, además de Beatriz de Suabia, esposa del primero) fueron trasladados a una capilla del Patio de los Naranjos. Volverían a la nueva capilla Real en 1579. El terremoto de Lisboa obliga a hacer algunas reparaciones en la Giralda allá por 1755.
Estos son los principales hitos históricos de la que es considerada la mayor catedral gótica del mundo, declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1987. Un lugar que en nuestros días es uno de los puntos turísticos más importantes de Sevilla, una ciudad donde podemos encontrar algún alojamiento turístico de calidad. A su alrededor se encuentran lugares tan emblemáticos como el Alcázar, vinculado desde hace siglos a la corona de España; el Archivo de Indias, recuerdo de los tiempos en que la ciudad fue puerta del comercio con las Indias; las plazas Virgen de los Reyes y del Triunfo; el actual Ayuntamiento, edificio construido en el siglo XVI; la Avenida de la Constitución, uno de los centros neurálgicos de la vida de sevillanos y visitantes; la antigua Fábrica de Tabacos, hoy sede de la Universidad de Sevilla… Siendo, además, antesala del barrio de Santa Cruz y de la Plaza y la Iglesia del Divino Salvador
Entre las curiosidades que adornan este templo están que cuenta con diez puertas, siendo la principal la de la Asunción, la del Príncipe o de San Cristóbal la más transitada y la del Perdón la más antigua y la única que se conserva de la vieja mezquita almohade. Una de las visitas más populares es la de sus cubiertas, desde donde pueden contemplarse unas vistas únicas de Sevilla, ciudad en la que podemos alojarnos en algún apartamento turístico con encanto, y que ayuda al visitante a comprender cómo se construyó esta seo y a admirar sus impresionantes vidrieras. En su majestuoso interior puede verse la tumba de Cristóbal Colón, descubridor de las Indias y contemplarse el Retablo Mayor, el más grande de la cristiandad (con casi 400 metros cuadrados de superficie), elaborado en madera policromada y con más de 200 figuras de santos.
La catedral de Sevilla, ciudad ideal para pasar unos días en algún apartamento turístico para toda la familia, es también un auténtico museo. Allí pueden verse obras maestras de la historia de la pintura. El retrato de San Fernando, el Bautismo de Cristo o la Inmaculada de Murillo y el cuadro de Santa Rufina de Goya son los más destacados, pero también cuenta con pinturas de Alonso Cano, Francisco Herrera el Mozo o Luis de Morales. En el apartado escultórico hay creaciones de Pedro Roldán, Alonso Martínez o Juan de Mesa, además de numerosas piezas de orfebrería de época gótica, renacentista, barroca o neoclasicista. Como auténtico tesoro está catalogada también la Custodia realizada por Juan de Arfe.
La Giralda, conformada por el alminar de la antigua mezquita y el campanario renacentista y a muy poca distancia de algún alojamiento de calidad y con encanto en Sevilla, cuenta con un total de 24 campanas, 18 con mecanismo de volteo y 6 de golpe de badajo, y cada una de ellas tiene su propio nombre. Trece tienen nombres de santos varones, nueve son de mujer y dos están dedicadas a la Santa Cruz y a Todos los Santos. La más grande, con más de 5 toneladas de peso y una altura que supera los dos metros, es la Santa María la Mayor; la más pequeña, de casi 140 kilos, lleva el nombre de Santa Cecilia; y las más antigua es la de Santiago, fechada en 1438.
Las visitas a la catedral están programadas de lunes a sábado de 10.45 a 13.30 horas y los domingos de 14.30 a 17.00 horas, con un tiempo estimado de 75 minutos. Los precios de las entradas es de 10 euros (general) y de 5 euros (reducida, para pensionistas y estudiantes de hasta 25 años). El acceso es gratuito para naturales o residentes en la Archidiócesis de Sevilla, menores de hasta 14 años acompañados por un adulto, discapacitados a partir del 65% y un acompañante en caso de necesitarlo y desempleados acreditados. Las visitas guiadas a la catedral y la Giralda serán los lunes y miércoles de 18.00 a 20.00 horas; y a las cubiertas los viernes en pases a las 17.30, 18.00, 19.30 y 20.00 horas, y los sábados y domingos, a las 9.30, 10.00, 11.30 y 12.00 horas. El tiempo estimado de estas visitas es de 90 minutos y el precio de 16 euros + 1 euro de auricular desechable por persona. Para más información sobre precios y horarios o modificación de estos hay que visitar https://www.catedraldesevilla.es/visita-cultural/horarios-y-tarifas/.
