30

BARRIO DE SANTA CRUZ, CALLES, PLAZAS Y RINCONES LLENOS DE BELLEZA (I)

Sevilla y barrio de Santa Cruz son dos términos que resultan inseparables. La antigua judería de la capital de Andalucía, donde en la época de Fernando III de Castilla se concentraba la segunda comunidad hebrea más importante de España tras la de Toledo, es uno de los espacios con más encanto de una ciudad que tiene mucho que ofrecer a toda aquel que la visita. De día es un placer caminar por sus plazas y sus estrechas calles llenas de olores y colores y de noche, sentarse en un velador para disfrutar de unas tapas y un buen vino en alguno de los bares con más solera de Sevilla. Y todo ello, en pleno casco histórico, como nuestro apartamento turístico en Sevilla. Arrancamos esta semana un recorrido que nos llevará a conocer a fondo este espacio tan turístico de Sevilla y todos sus sorprendentes rincones.

A pesar de su fama, la tranquilidad del barrio de Santa Cruz es cautivadora. Al igual que su belleza, que nos atrapa en un torbellino de sensaciones y emociones. Y las leyendas que lo acompañan, como que las almas de Bécquer y su personaje de Don Juan Tenorio y las de los judíos fallecidos siguen vigilando el barrio para conservar su antigua identidad. Y toda esta historia y belleza a solo un agradable paseo de nuestro apartamento de vanguardia en el centro de Sevilla.

De su pasado judío es la leyenda de la joven Susona, una joven hebrea que vivió en sus calles y que, conocedora de que su padre trataba de organizar una revuelta en la ciudad, avisó al caballero cristiano del que estaba enamorada. Las autoridades de la ciudad acabaron con la revuelta y el padre, conocedor de la acción de su hija, decidió repudiarla. Cuenta la tradición que, a su muerte, su cabeza fue suspendida del balcón para escarnio por su traición. Por ello, una placa que representa una calavera adornada la fachada de la que fuera su casa.

Tras la expulsión de la comunidad hebrea de España en 1492, el barrio quedó medio abandonado y sufrió un importante deterioro. Una restauración llevada a cabo en el siglo XX le dio la apariencia que tiene en la actualidad. Sin perder su esencia histórica y su particular encanto. El encanto que tiene también nuestro apartamento en el centro histórico de Sevilla.

Desde la plaza Santa Cruz hasta los Jardines de Murillo, descubriremos en este barrio sevillano lugares tan emblemáticos y sorprendentes como la calle Fabiola, el Callejón del Agua, la parroquia de Santa Cruz, el convento de Madre de Dios o la venerada Cabeza del Rey don Pedro mientras paseamos por esas calles estrechas y sinuosas que poseen nombres tan evocadores con Judería, Agua y Vida y admiramos sus patios repletos de plantas y flores y sus casas de blancas fachadas.

La entrada al barrio, tras haber descansado cómodamente en nuestro apartamento de lujo en el centro de Sevilla, podemos hacerla por el Patio de Banderas para después abandonarlo por los Jardines Murillo. El primero, hoy un amplio espacio público lleno de naranjos que lo impregnan de un maravilloso aroma a azahar durante la primavera y de varias viviendas, fue en su día el patio de armas del Real Alcázar, un esplendido edificio lleno de majestuosas estancias y exuberantes jardines que, si tenemos tiempo, debemos conocer.

Los Jardines de Murillo, conocidos con anterioridad como Jardines o Huerta del Retiro, también formaban parte del Real Alcázar hasta que en 1862 fueron donados a la ciudad para permitir ampliar una Feria de Abril que, por aquel entonces, se celebraba en el Prado de San Sebastián. Su actual aspecto es obra del diseño realizado por Juan Talavera en 1915 y su nombre proviene de la petición hecha por el director del periódico El Liberal para que se homenajeara al célebre pintor sevillano, quien había sido enterrado en la iglesia que estuvo en la cercana plaza de Santa Cruz. Entre las plantas que podemos encontrar cuando lo paseamos hay naranjos, ficus, damas de noche, magnolios… Sus avenidas y glorietas están decoradas con fuentes y bancos revestidos de cerámica y en una de sus plazas podemos contemplar el monumento a Colón y los Reyes Católicos.

Compartir este Post: