Nuestro paseo de esta semana nos llevará a la Ciudad del Sol, a la Ciudad de las Torres, a la Sartén de Andalucía. ¿Muchos lugares para un solo fin de semana? No es así. Esos tres sobrenombres se refieren a una misma localidad, Écija, considerada como uno de los Conjuntos Históricos más importantes del sur de España. Y también visitaremos la capital de Andalucía, ya que la mejor opción para disfrutar de unos días de ocio y descanso es alojarnos en un apartamento turístico en Sevilla.

Aquí nos detendremos en la triángulo Patrimonio de la Humanidad que conforman la catedral, acompañada siempre de su inseparable Giralda, el Alcázar, palacio real en uso más antiguo de Europa que cuenta con unos lujosas estancias y unos singulares jardines, y el Archivo de Indias, memoria viva de las posesiones españolas de ultramar.

A un agradable paseo de nuestro apartamento turístico para toda la familia en Sevilla está el bellísimo barrio de Santa Cruz, antigua judería de Sevilla; y también el río Guadalquivir, siempre bajo la atenta mirada de la Torre del Oro mientras fluye bajo el famoso Puente de Triana, que da acceso al barrio marinero de los artistas.

También podemos acercarnos a descubrir el singular Parque de María Luisa y la espectacularidad de la Plaza de España, punto de partida del recorrido por los interesantes vestigios arquitectónicos que dejó en la ciudad la Exposición Iberoamericana de 1929, con un nombre destacando por encima de todos, el del arquitecto sevillano Aníbal González.

Écija, nuestro destino de esta semana o no mucha distancia en coche desde nuestro apartamento turístico en el centro de Sevilla, tiene a sus espaldas una larguísima historia que se remonta al siglo VIII antes de nuestra era, en tiempos de la civilización tartésica. Fue primero probablemente un pequeño poblado, emplazado en la suave elevación junto al río Genil que hoy se conoce como Cerro del Alcázar o de San Gil.

Viviría su mayor esplendor durante la dominación romana de la Península con la fundación ya en el llano de la denominada ‘Colonia Augusta Firma Astigi’, una gran ciudad de nueva planta con, entre otros servicios, calles pavimentadas, red de distribución de agua, foro, templos, termas y un anfiteatro. Su importancia se mantuvo en época visigoda y con la llegada de la cultura islámica, siendo reconquistada en 1240 por Fernando III.

Pero quizás la etapa más brillante sea el siglo XVIII, considerado como ‘El Siglo de Oro ecijano’ al vivir un esplendor constructivo de palacios e iglesias, una vez que por sus calles pasearon los miembros de más de 40 familias nobiliarias, entre ellas 13 Grandes de España. Por eso, su casco histórico está considerado uno de los legados de arquitectura y arte barroco de toda España, conformado por ricos palacios, iglesias con altas torres que han dado sobrenombre a la ciudad, conventos, edificios públicos…, además de contar con amplios y ricos archivos documentales.

En este paseo nos centraremos, ya que hemos comenzado hablando de su historia y antes de regresar a nuestro apartamento turístico con todos los servicios en Sevilla, en la riqueza arqueológica de esta ciudad. La primera visita nos llevará al Museo Histórico municipal, ubicado en el Palacio de Benamejí, modelo espectacular de la arquitectura barroca del siglo XVIII.

Aquí podremos contemplar una de las cuatro esculturas ‘Amazona herida’ que existen en el mundo. Las otras están en Nueva York, Berlín y Roma. Está muy bien conservada, incluso con restos de policromía, y mide unos dos metros. En las nueve salas de este espacio expositivo encontramos vestigios de gran valor desde tiempos prehistóricos, destacando las tres estelas metálicas de guerreros, pasando por el periodo protohistórico, con la singular pieza de orfebrería tartésica conocida como la ‘Placa de Écija’, hasta llegar a la época romana, donde, además de la estatua antes mencionada, hay bellísimos mosaicos como el de las Estaciones del año, los Océanos, el del Don del vino, las Nereidas o el Triunfo de Baco. Hay lugar también para elementos de la etapa visigoda y espacios dedicados al regadío andalusí, la islamización y los ritos funerarios musulmanes.

En la Plaza de España, conocido por los vecinos como El Salón, en el espacio que ahora ocupa un aparcamiento público aún permanece visible parte de la antigua ciudad romana. Fue aquí donde se halló la ‘Amazona herida’. El lugar es el corazón de la ciudad muy probablemente desde el siglo XV e, integrados con el actual pavimento, se encuentran vestigios antiguos como un estanque romano y algunos fragmentos del templo dedicado al culto imperial, todo ello datado en torno al siglo I. Está configurada, desde época medieval, siguiendo el estilo castellano, como una plaza con soportales y en ella destacan los palacios de Benamejí y Peñaflor y las iglesias de San Francisco y Santa Bárbara. Desde la plaza, antes de volver a la comodidad de nuestro apartamento para turistas en Sevilla, podemos acceder a la calle de Abajo y contemplar la fuente que, según la leyenda, sirvió a Pablo de Tarso para cristianizar a los astigitanos.