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PASIÓN Y VIDA POR LAS CALLES DE SEVILLA PARA SENTIR LA SEMANA SANTA (IV)

Hemos hecho a lo lago de esta semana un recorrido en este blog, en el que te invitamos a disfrutar de un apartamento turístico en Sevilla, por la primavera de una de las ciudades, la capital de Andalucía, que vive en esta época dos de sus fiestas más reconocidas internacionalmente, la Semana Santa y la Feria de Abril. Concluimos ahora nuestro paseo por una Semana de Pasión que empezó el Viernes de Dolores y que se ha extendido hasta el Domingo de Resurrección. Unos días en que las calles y rincones se convierten en el escenario de un sentir de devoción y pasión que sobrecoge los corazones.

Hemos aprovechado también, desde nuestro alojamiento en Sevilla, para conocer espacios de tanto valor artístico y cultural como la catedral, templo gótico más grande del mundo al que no deja nunca solo la Giralda, torre campanario cristiano que en otro tiempo fue alminar musulmán; el Alcázar, palacio real en uso más antiguo de Europa con unos jardines que son un auténtico vergel con especies llegadas de los cinco continentes y unas estancias que provocan asombro por su belleza; o el Archivo de Indias, memoria viva de los dominios españoles de ultramar a lo largo de varios siglos. Un triángulo que está reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Aunque no podemos irnos de nuestro apartamento en Sevilla sin darnos un paseo por el romántico y singular barrio de Santa Cruz; o por el que un día fuera jardín privado de los duques de Montpensier y hoy disfrutan todos los sevillanos y visitantes, el Parque de María Luisa; o por la Plaza de España, monumento más emblemático de la Exposición Iberoamericana de 1929 y quizás la obra más importante del insigne arquitecto Aníbal González; o por la ribera del río Guadalquivir, que divide y al mismo tiempo une a Sevilla y a Triana, y cuyo discurrir hacia el mar siempre contempla la Torre del Oro. Incluso, podemos adentrarnos en una de las pinacotecas más importantes de España, el Museo de Bellas Artes.

Pero volvamos a la Semana Santa y al Viernes Santo. Una vez superada la resaca de la Madrugá y de haber descansado en nuestro apartamento turístico en el casco histórico de Sevilla, llega el momento de ver procesionar al que quizás sea el crucificado más impresionante de toda esta semana de pasión, el Cristo de la Expiración, más conocido como El Cachorro. Un sobrenombre que provendría del apodo del gitano agonizante en el que el autor de la obra, Francisco Antonio Gijón, se inspiró antes de tallarla en 1682. Otras de las hermandades de este día son la Carretería, que tiene sus orígenes en 1550 en el gremio de los toneleros, en el hospital de San Juan y cuyo paso de misterio muestra a Jesús crucificado junto a los dos ladrones; y la Soledad de San Buenaventura, con un solo paso que muestra a la Virgen junto a la cruz vacía de la que cuelgan unos lienzos blancos.

Son hermandades también de este día San Isidoro, que nace a comienzos del siglo XVII en San Benito de la Calzada, con un paso de misterio en el que se ve a Jesús portando la cruz y es obra de Alonso Martínez, allá por 1668; ; Montserrat, cuya devoción arranca a finales del siglo XVI en San Ildefonso y que cuenta con un paso de misterio en el que Jesús crucificado, esculpido en 1620 por Juan de Mesa, va acompañado de María Magdalena; y la Mortaja, un único paso en el que María porta en sus brazos a Jesús ya muerto en presencia de San Juan, las Marías y los Santos Varones y con la cruz con lienzos blancos a sus espaldas. Se completa esta jornada con la hermandad de la O, fundada en 1566 en el desaparecido hospital de Santa Brígida, siendo el Cristo con la cruz a cuestas obra de Pedro Roldán de 1685.

El Sábado Santo son cinco las hermandades que salen a las calles, pasando todas ellas muy cerca de nuestro apartamento para toda la familia en Sevilla. Son la hermandad de El Sol, cuyos orígenes están en 1932 y cuenta con una imagen del Cristo tallada en madera de cedro a tamaño natural en 2003; Los Servitas, cofradía nacida en 1971 y con un grupo escultórico del primer paso obra de José Montes de Oca en 1730; la Trinidad, que debe sus orígenes a un grupo de hortelanos y cuenta con tres pasos, uno de ellos una alegoría de Dios-Hijo, Dios-Padre y Dios-Espíritu Santo; el Santo Entierro, fundado en el convento de San Laureano allá por el 1570 y que procesiona con tres pasos, La Canina (nombre popular que recibe la representación de la muerte, el Cristo yacente y la Virgen de Villaviciosa; y la Soledad de San Lorenzo, fundada en el monasterio de Santo Domingo de Silos a mediados del siglo XVI.

Cierra los desfiles procesionales de la Semana Santa, a una hora temprana del domingo (08:30 horas), la hermandad de la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, que nace en 1969. La talla del Señor es de 1973, y el ángel que lo acompaña, de 1975, siendo ambas obras de Francisco Buiza. La Virgen, por su parte, fue esculpida en 1978 por Antonio Joaquín Dubé de Luque. Llega el momento de decir ‘hasta luego’ a nuestro cómodo alojamiento en Sevilla.

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