Hablar de Sevilla es hablar de una de las ciudades más bellas del mundo. Una ciudad, donde podemos disfrutar de un alojamiento en el centro de Sevilla, que cuenta a sus espaldas con una historia de siglos que le llevó a ser durante algún tiempo, en aquellos tiempos en que España era un imperio donde no se ponía el sol, una de los centros económicos, sociales y culturales más importantes del mundo.
Cuenta con un patrimonio histórico-artístico difícil de igualar, sobre todo cuando nos referimos ese espacio, muy cerquita de nuestro apartamento turístico en Sevilla, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO que conforman la catedral, templo gótico más grande del mundo a la que siempre contempla desde las alturas su inseparable Giralda; el Archivo de Indias, memoria viva de los dominios españoles de ultramar; y el Alcázar, palacio real en uso más antiguo de Europa con unas estancias de indescriptible belleza y unos jardines que son un auténtico paraíso natural al albergar más de 500 especies botánicas procedentes de los cinco continentes.
Son, además, lugares cercanos a nuestro alojamiento en Sevilla y con un incontestable encanto el barrio de Santa Cruz, antigua judería de la ciudad, con sus estrechas callejuelas y sus plazas oliendo a azahar; el Parque María Luisa, jardines que un día pertenecieron al palacio de los duques de Montpensier y hoy es lugar de paseo para cientos de sevillanos.
También la Plaza de España, obra del singular arquitecto Aníbal González y gran estandarte de aquella Exposición Iberoamericana de 1929 de la que se conservan aún multitud de vestigios en la ciudad; la Torre del Oro, mirando siempre su reflejo en las aguas del río Guadalquivir; el Museo de Bellas Artes, una de las pinacotecas más importantes del país; el marinero y artístico barrio de Triana…
En esta ocasión nuestro destino es el Alcázar. Y es que regresa a este mágico espacio, donde llegaremos dando un corto paseo desde nuestro apartamento para toda la familia en Sevilla, su ciclo de visitas teatralizadas nocturnas que, en esta ocasión, tendrán como protagonistas a aquellas ‘mujeres olvidadas en la historia’ del monumento. Las representaciones, que correrán a cargo de la Compañía Teatro Clásico de Sevilla, se extenderán desde el 9 de junio al 21 de octubre de 2023.
La reserva para estas visitas ya está abierta así como la posibilidad de disfrutar de unos días de ocio y descanso alojados en un apartamento bien situado en Sevilla. Habrá cuatro pases (21:00, 21:30, 22:00 y 22:30 horas) los jueves, viernes y sábados, de junio a septiembre; cambiando los horarios en el mes de octubre (20:00, 20:30, 21:00 y 21:30 horas). En cada una de las visitas, el número de participantes no podrá superar las 40 personas.
Las representaciones teatralizadas se llevarán a cabo por los jardines y las estancias del Alcázar y contarán con la presencia de seis personajes históricos femeninos vinculados a él: Laura Herrera, arrendadora del Corral de Comedias de la Montería; Itimad, esposa del rey poeta Al Mutamid; María de Portugal, mujer del rey Alfonso XI, conocido como ‘el Justiciero’, y su amante Doña Leonor; La Herradera, partera de Isabel la Católica (cabe recordar que en una de estas estancias nació el príncipe Juan, hijo de Isabel y Fernando de Aragón); y María de Portugal, mujer de Alfonso XI.
Aparecerán por el Alcázar también Germana de Foix, segunda esposa de Fernando el Católico a la muerte de Isabel; María de Navas ‘La Trufaldina’, bailarina de la compañía de Los Trufaldines, con gran éxito en España a comienzos del siglo XVIII, durante la corte de Felipe V; María Luisa Fernanda de Borbón, duquesa de Montpensier, quien cedería a la ciudad de Sevilla el Parque que lleva su nombre; y Cecilia Böhl de Faber, más conocida literariamente por su seudónimo ‘Fernán Caballero’. Esto personajes históricos contarán con la ayuda de otros cuatro, estos ya de ficción, como Beatriz Sotillo, mujer del cantero y cocinera; Verónica de Masadé, dama de Isabel de Farnesio (esposa de Felipe V), Romualdo Álvarez, periodista; y Miguelito de Acebuche, tañedor de laudes.
